19 de noviembre de 2007

Decimocuarta reunión en Valencia

Con cierto retraso, publico hoy lo acontecido en la decimocuarta reunión en Valencia, que se celebró el pasado domingo 4 de noviembre. Parece que siguen manteniendo alto el interés del personal y repiten con nueve asistentes, número que ya nos gustaría alcanzar en otros lares. Nuevamente, la crónica tenemos que agradecésela a Dimitri, esta vez con ayuda de José Antonio.

¡Saludos desde Valencia!

Rich Dad Club Valencia sigue su marcha y anuncia orgullosamente que el pasado 4 de noviembre celebramos nuestra decimocuarta reunión Cashflow.

Como siempre, dediquemos unas cuantas líneas a agradecer la amabilidad del anfitrión. Gracias a que dentro de nuestro grupo existan personas que nos siguen ofreciendo amablemente sus casas, no tenemos la necesidad de reunirnos en restaurantes o cafeterías donde el ambiente es tan frío :). Esta vez Eduardo, nuestro anfitrión habitual, nos ofreció no solamente su casa, sino la sede de ACN en Valencia, equipada con la última tecnología (famoso proyector incluido). ¡Hasta un atril había por allí! Daban ganas de dar una charla :). Devolvemos el favor ofreciendo a los lectores interesados en encontrar una buena y sorprendentemente seria red de Marketing Multinivel en un sector tan atractivo como las telecomunicaciones que se pongan en contacto con Edu.

En cuanto a la asistencia, parece que el también seguimos en marcha –está vez volvimos a repetir nuestro record de 9 personas por partida-. No todos estuvieron desde el principio, ya que Jonathan y Francis llegaron más tarde, pero todos salieron en la foto:


De izquierda a derecha: Mª Esther, Ramiro, Nacho, Dimitri, Eduardo, José Antonio, Arturo, Francis y Jonathan.

Damos la bienvenida a nuestras nuevas incorporaciones: Arturo, proveniente del país de las enchiladas y chilaquiles: México y a Nacho, un asturiano a quien habíamos fichado en la 1º Reunión Europea de Programa de Formación de Inversores (PFI).

Tras un ligero desayuno en Nibs que seguramente será lugar de nuestra próxima reunión sin juego, subimos arriba para empezar a jugar.

Como éramos 7 personas, más Jonathan y Francis que llegarían después, nos separamos en dos grupos: uno, compuesto por Dimitri, Mª Esther, Ramiro y Arturo, jugó con el tablero, mientras que el otro (Eduardo, José Antonio y Nacho, más el espíritú de Jonathan y Francis) disfrutó de la versión electrónica.

La partida en las dos "mesas" se desarrollo de forma muy fluida. A pesar de que empezamos un poco tarde, casi llegamos a terminar las dos partidas. En la primera mesa el único que logró salir de la carrera de la rata fue Dimitri, gracias a la compra final de un negocio, mientras que Arturo tuvo menos suerte ya que estuvo gran parte de la partida observando las operaciones de los demás, ya que pocas veces caía en las casillas de oportunidad. Sin embargo, hay que destacar que se adaptó muy rápido a la partida a pesar de jugar por primera vez. Ramiro se había convertido en un auténtico broker, comprando y vendiendo acciones sin parar (y no le iba nada mal), mientras que Mª Esther luchaba poco a poco para ir disminuyendo la diferencia entre los ingresos pasivos y los gastos. (Siento la ausencia de demasiados detalles, esta vez lo pasé por alto :)).

En la otra mesa el ambiente parecía muy divertido. En este caso sí tenemos los detalles de la partida gracias a José Antonio quien nos lo relata en primera persona:

Veamos, todos tenían puestos de gente adinerada menos yo, que me tocó ser alguien con pinta de atracador que dice ser diseñador web. Para compensar eso un poco, hice que mi personaje usara sostén, para alegrar la vista aunque sea (ya os imaginaréis el tipo de bromas que me tocó aguantar...).

Todos en algún momento caímos en despido. Y se ve que al estar mi presencia femenina, fomentó un poco a todo el mundo a tener algún que otro crío. Éramos 4, pero yo llevaba las finanzas de Jonathan hasta que llegara. Menos Nacho, todos pudimos vender nuestras 3/2, y acceder al fin a las grandes oportunidades.

Llevando yo aún las cuentas de Jonathan, compré por él una gran oportunidad que le daba un buen ingreso pasivo, pero luego lo vendí porque le daba muchísimos beneficios, de forma que se plantó con más de $220.000 en su cuenta. Obviamente, la gente empezó a sacar grandes oportunidades para vendérselas.

Al poco llegó Jonathan con su mujer. Como yo tenia pocos gastos que cubrir, enseguida salí de la carrera de la rata, gracias a una oportunidad que Edu me vendió bastante barata.

Jonathan pudo haberle comprado una buena oportunidad a Edu y salir también, pero como acababa de llegar, lo rechazó para disfrutar un rato más de la partida con su mujer.

Edu había invertido bien su dinero, y solo le quedaba ir liquidando préstamos mes a mes para salir inexorablemente de la carrera de la rata. Solo era cuestión de tiempo.

Nacho tuvo la mala fortuna de caer un par de veces en despido, pero se mantuvo a flote. Como dijo Edu, aún estaba lejos de quitarme mi puesto como primer y único jugador que llegó a la Bancarrota.

Y en fin, nadie más tuvo tiempo de salir de la carrera de la rata, porque yo ni había completado una vuelta, sin haber comprado nada, y caí en mi sueño, de cabeza. Mucha gente se alegrará de que encontré la cura para el SIDA. ;)

Fue una partida corta, pero productiva. Caímos en la cuenta de algunas cosas que, aunque ya sabíamos, olvidábamos por la falta de práctica.

Hablando con Nacho, nos dimos cuenta de que es mejor liquidar las deudas sin pensar en si el dinero empleado para liquidar, lo necesitaremos después. Hay que tener en cuenta que ese dinero siempre se puede pedir más adelante, y mientras nos ahorramos pagar esos intereses abusivos.

Cosas sencillas, pero que a veces se nos pasan.


Tuvimos que irnos más pronto de lo normal ya que Eduardo tenía asuntos personales pendientes, pero nos quedamos un rato charlando en la calle. Era interesante conocer la opinión de las nuevas incorporaciones sobre este tipo de reuniones para recibir una especie de feedback y poder mejorar la operativa. La gente coincidía en la importancia de las reuniones Cashflow para conocer personas nuevas con los mismos objetivos y la misma mentalidad, aparte de abrir un poco más la mente jugando al juego. Sin embargo, todos se quedaron con ganas de hablar sobre proyectos reales, para pasar del juego a las cosas más concretas. Hubo varias ideas interesantes, como, por ejemplo, la de Nacho que ofrecía comprar plantas de garajes a los constructores para obtener así un descuento importante y comercializarlos después.

Para seguir hablando de ello, programamos la siguiente reunión sin juego que se celebró el pasado viernes 16 de noviembre. En breve tendréis la crónica de la misma.

Un abrazo,

Dimitri Uralov
Rich Dad Club Valencia

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