Decimocuarta reunión en Madrid
Al poco de llegar yo, llegaron Rodrigo, Gustavo y Rafa. Dejamos una hoja en la puerta con mi móvil, por si alguien llegaba más tarde, y nos fuimos a buscar un sitio para comer. Acabamos en La Portada de Chamberí, que está en la esquina entre las calles Hartzenbusch y Cardenal Cisneros.
Allí comimos tranquilamente unas raciones mientras cada uno comentábamos las cosas en las que andamos metidos para intentar alcanzar la independencia financiera: compra de promociones sobre plano, huertas solares, inmuebles en el extranjero, bolsa... y, por supuesto, mis negocios raros. También estuvo dando vueltas un proyecto de manual práctico que quizás algún día vea la luz.
A los cafés se nos unieron Gonzalo, Gabriel y David. Y aparecieron en la conversación nuevos negocios como las granjas de blogs y la reparación de ordenadores.
A las 17.00 habíamos quedado en el Chaiselongue para la partida. De camino hacia allí nos dejó Rafa, que tenía partido, y se nos juntó Jesús.
Cuando llegamos, nos encontramos el Chaiselongue -de los mismos dueños que La Casa de la Cerveza- también cerrado. En la puerta, nos estaban esperando Aníbal, Ángel, María José, José, Mercedes, Alejandro y Patricia, y llegaban en ese momento Alfonso, Rosana, Miguel y Cristina.
Después de dejar la hoja con mi móvil correspondiente en la puerta, por si había algún rezagado, nos dirigimos al lugar donde habíamos estado tomando las raciones. Cuando estábamos llegando, llamó Nacho que estaba en la puerta del Chaiselongue, y le indicamos dónde encontrarnos.
Por su habéis perdido ya la cuenta, nos juntamos 19 personas, una más que las 18 de la Tercera reunión en Barcelona, y nuevo record de participación. Se nota que después del parón veraniego, la gente estaba con ganas de participar.
Nada más sentarnos nos hicimos la foto de rigor.
De izquierda a derecha: Gabriel, Jesús, David, Rosana, Alfonso, el brazo de Cristina, Miguel, Nacho, Patricia, Alfonso, Rodrigo, Ángel, Alejando, María José, Aníbal, Gustavo, Gonzalo, Mercedes, José y Jaizki.
Como éramos tantos, nos dividimos en dos partidas y varias personas tuvieron que jugar en parejas. Yo me quedé inicialmente fuera del juego para ir de una mesa a otra resolviendo las dudas que apareciesen, que fueron muy pocas. Rodrigo y Nacho se tuvieron que ir y yo acabe jugando un rato la partida que habían empezado.
Como ésta vez no estuve demasiado metido en las partidas, no puedo contar con demasiado detalle lo que pasó, pero os dejo un breve resumen.
En la mesa de la izquierda de la foto, David fue el campeón indiscutible, aunque no llegase a comprar su sueño. Empezó como piloto y no paró de hacer negocios. Consiguió dar un par de pelotazos con acciones, compró todas las casas que pudo y acabó saliendo de la carrera de la rata después de aprovechar la venta de unas casas para cancelar toda la deuda que había acumulado.
En la mesa de la derecha, hubo una dura competición entre Aníbal y Gustavo, que desde el principio se pusieron en cabeza en inversiones. Gustavo fue el primero en llegar a la vía rápida y, aunque mientras daba vueltas y vueltas sin conseguir comprar su sueño se le fueron uniendo más personas, consiguió ganar.
En general, como en otras ocasiones, la gente que asistió comentó habérselo pasado muy bien y salir con nuevas ideas sobre la independencia financiera. Espero que muchos de ellos empiecen a aplicar esas nuevas ideas y que se animen a repetir en las futuras reuniones que se organicen.
El punto negativo de la reunión fue que al recoger, los últimos nos encontramos con que habían quedado algunas cosas sin pagar. Supongo que con tanta gente es normal que alguien se despiste, pero habrá que tenerlo en cuenta para futuras ocasiones. Esta vez tuvimos un patrocinador espontáneo se hizo cargo: cangurorico. Por cierto, podéis leer su entrada sobre la Reunión Padre Rico Padre Pobre en Madrid.
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