12 de marzo de 2006

Network Marketing y Multi-Level Marketing (MLM)

Cuando se decide llegar a la independencia financiera siendo dueño de un negocio, se puede optar por cuatro opciones: montar un negocio propio, comprar uno existente, convertirse en franquiciado o unirse a una red de Network Marketing o MLM.

Cada una de estas opciones tiene sus ventajas e inconvenientes. Empezar un negocio es posiblemente la opción más complicada, pero la que puede ofrecer mayores beneficios potenciales. Comprar implica menos riesgos, pero hay que tener mucho cuidado con lo que se compra. Las franquicias tienen la ventaja de ofrecer una imagen conocida y un negocio probado, pero limitan la capacidad de decisión y exigen, normalmente, el pago de un canon de entrada y un porcentaje sobre las ventas.

El Network Marketing o MLM es posiblemente la opción menos conocida, y la que puede plantear más dudas. El propio Kiyosaki habla favorablemente de esta opción, aunque deja muy claro que hay que analizar muy bien la compañía antes de unirse.

En una compañía de MLM, el representante vende los productos de la misma a cambio de una comisión y, además, si consigue otros representantes que vendan el producto recibe una comisión sobre las ventas de estos.

La ventaja fundamental del MLM está en sus bajos costes de entrada, la posibilidad de compatibilizarlo con un empleo convencional y también la de conseguir ingresos pasivos generados por los representantes captados por uno.

Sin embargo, este tipo de negocios exige importantes aptitudes para la venta. Debes tener en cuenta que la compañía sólo paga por tus resultados: si vendes cobras, si no vendes no cobras. La venta ni es fácil ni es agradecida y, sobre todo, no está relacionada con tu esfuerzo. Puedes dedicar muchas horas y no vender nada, o todo lo contrario -aunque no es lo habitual-. Mucha gente que se apunta a estos negocios los deja después de comprobar que sólo es capaz de vender a sus familiares y amigos.

¿Y qué hay de los ingresos pasivos? Esta es la parte más comprometida del MLM. Demasiadas compañías han abusado de esta fórmula para organizar negocios poco honestos basados en la venta piramidal. Cualquier propuesta en la que los ingresos obtenidos sean desproporcionados frente al esfuerzo realizado, debería hacerte desconfiar. En general, cualquier negocio en el que los ingresos provienen de la incorporación de otros miembros, y no de la venta de un producto, es un claro ejemplo de negocio del que hay que huir.

No digo que en esos negocios no se pueda ganar dinero, claro que se puede, pero -dejando de lado consideraciones éticas- dependerá de en qué fase te incorpores al negocio. Mientras el negocio esté creciendo todos los que están implicados cobrarán, pero cuando el negocio deje de crecer, el castillo empezará a desmoronarse.

Por otro lado, si encuentras un negocio serio, con un buen producto, y pretendes vivir de los ingresos pasivos por las ventas de quienes hayas introducido en el sistema, ten muy presente que hace falta que ellos sean buenos vendiendo y que, aún siéndolo, pueden decidir hacer lo mismo que tú, con lo que si no incorporas más gente puede llegar un momento en el que desaparezcan esos ingresos pasivos. Así que procura no gastar como si esos ingresos fuesen a durar siempre.

Resumiendo, si te decides por el MLM, asegúrate de que hay una compañía honesta detrás, de que el producto es competitivo y de que estás capacitado para venderlo. Y si quieres vivir de ingresos pasivos generados por otros, asegúrate de incorporar regularmente nueva gente con aptitudes para la venta.

Más información:
- Marketing multinivel en la Wikipedia.
- The Real Problem with Network Marketing and Multi-Level Marketing (MLM)
- Top 10 Ways to Choose a Great Network Marketing Opportunity

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